COACHING Y MENTORING EN EL LIDERAZGO

El mentoring es una disciplina con más de 5000 años de práctica. Aunque el término "mentor" se popularizó a partir de la mitología griega, donde Ulises encomienda a su amigo Mentor la educación de su hijo Telémaco, su aplicación ha trascendido a lo largo de la historia. Tradicionalmente, la mentoría ha sido prominente en campos como la medicina, la educación y la religión. Sin embargo, en años recientes, el mentoring empresarial ha ganado tracción globalmente, sirviendo como un medio para transmitir valores, conocimientos y experiencias.

El mentoring se basa en una relación en la que existe un modelo a seguir, estrategias motivacionales, monitoreo del crecimiento personal y un efecto multiplicador. Este enfoque busca generar liderazgo transformador y trascendental a través de técnicas directivas.

En el ámbito del equipo, el mentoring facilita una dinámica comunicacional participativa y responsable, fomentando el crecimiento individual y colectivo al compartir el conocimiento colectivo (know-how). Los aspectos clave que se transmiten en un equipo de mentoring incluyen:

• Experiencia y conocimiento
• Habilidades profesionales
• Asesoría oportuna
• Valores y cultura de trabajo

El coaching tiene sus raíces en la filosofía de Sócrates, quien desarrolló la "mayéutica". Inspirado por las observaciones de su madre partera, Sócrates estableció que no se puede enseñar al ser humano, sino ayudarle a descubrir su ser intelectual a través de preguntas facilitadoras.

Durante los años cincuenta y sesenta, la mayéutica evolucionó en la andragogía y las terapias psicológicas no directivas. En las décadas de los setenta y ochenta, estas técnicas se aplicaron en la psicología del deporte, acuñándose por primera vez el término "coaching". En los años ochenta, John Whitmore introdujo el coaching en el ámbito empresarial, desde donde ha evolucionado y se ha ramificado en varios enfoques.

Lo interesante de esto es que ambas disciplinas tienen objetivos diferentes, pero utilizan una metodología similar.  Podríamos decir que son las dos caras de una moneda. Mientras que una intenta transferir conocimiento, experiencia y valores, la otra trata de sacar las fortalezas que hay dentro de una persona usando la mayéutica como método principal.

Por tal motivo ambas diciplinas pueden enfocarse en el desarrollo de habilidades técnicas, habilidades blandas y mejora de situaciones actuales.

Un coach es un profesional capacitado para observar e intervenir en la forma en que las personas actúan, orientándolas de manera no directiva para que aprovechen sus competencias y talentos. A nivel institucional, el coaching implica un conjunto de esfuerzos y técnicas enfocadas en el equipo humano de una organización.

Entonces entendemos, que a diferencia de un mentor, que transfiere conocimiento, habilidades y carácter, el coach se centra en el autodescubrimiento  que una persona (cliente) puede hacer desde una perspectiva constructivista. Ambas se enfocan en cuatro aspectos clave: Clarificar, Desafiar, Resumir y Afirmar.

Para concluir podemos decir que el mentoring y el coaching son herramientas poderosas en el liderazgo moderno. Mientras el mentoring ofrece un enfoque basado en la transferencia de conocimiento y experiencia, el coaching facilita el autodescubrimiento y el desarrollo de la persona,  integrándose efectivamente una con la otra en la dinámica de trabajo en equipo.